Hay que reconocer que, aunque siempre es posible el milagro, el equipo es el que es
Siempre han dicho los filósofos y todas las personas con sentido común que la gran tragedia de los hombres es no poder dar marcha atrás cuando se comete un error, no poder volver para evitar aquel traspié en que se incurrió o realizar aquella tarea que uno no se atrevió a llevar a cabo en su día. Por el contrario en este sentido lo bueno de la vida viene cuando hay nuevas oportunidades y se pueden deshacer los resbalones anteriores. Pero desperdiciar estas nuevas ocasiones para recuperar el terreno perdido o iniciar el camino del éxito sí que es verdaderamente deplorable, un dislate muy lamentable. Como le está ocurriendo al Real Jaén una y otra vez. Cada vez que se abre una puerta y se ensancha el horizonte, siempre que parece que puede remontar el vuelo hacia arriba como si nada malo hubiese ocurrido, por unas u otras causas el equipo da la de arena y rechaza esa nueva ocasión con la que se encuentra. Al hilo de esta reflexión, releyendo el otro día una novela muy curiosa e inteligente que se publicó hace unos años sobre cómo entender las culturas indígenas (“El antropólogo inocente”), por una razón incidental de pronto el pensamiento me llevó al Real Jaén. En ella se cuentan las molestias e incomodidades que para un europeo tienen algunos rituales de los dowayos, entre ellos el del saludo. El asunto es que, en lugar del ¡hola! o el ¡buenos días! tan breves y escuetos que nosotros usamos, en el país de referencia cada vez que el protagonista se encontraba con un dowayo tenía la obligación social de preguntarle en su idioma “¿está el cielo despejado para ti?”, a lo que el nativo, en el caso de que así aconteciese, respondía “El cielo está despejado para mí. ¿Está despejado para ti?” y de nuevo “el cielo está despejado también para mí”. Y así una y otra vez lo mismo en cada concurrencia. Pues la anécdota es una semblanza bastante aproximada del diálogo permanente que se da con todos aquellos con los que el equipo se va topando por la geografía española. Seguro que el cielo está abierto para vosotros, dicen una y otra vez todos lo que se relacionan con el Real Jaén ponderando sus extraordinarias virtudes, insistiendo en que es un fenomenal equipo que en ningún caso merece estar donde está. Pues a lo mejor hay que empezar a reconocer que ni cielo despejado, ni nada de nada. Agradecer los piropos pero aceptar que, aunque siempre es posible el milagro, el equipo es el que es.
LA OPOSICIÓN A VILLAR SOLICITA QUE ACTÚEN FIFA Y UEFA
Hace un tiempo se denunciaron en la prensa gravísimas y escandalosas irregularidades económicas supuestamente cometidas por directivos de la Federación Española de Fútbol. Se dijo que pasaban al poder judicial para dilucidar su veracidad y nada más se ha sabido de ello. La plataforma "Federación de Todos", que abandera la oposición, ha solicitado la intervención de ambos organismos.
JUGADORES CON CONTRATOS VITALICIOS
Estos días se ha hecho público que el Real Madrid ha firmado un contrato vitalicio, es decir para toda su vida profesional, con dos de sus jugadores más representativos Raúl y Casillas. Y, al parecer según se anuncia, otros futbolistas van a gozar del mismo privilegio. Se dice de Guti y, en el Reino Unido, de Cesc. Algún socarrón ha sentenciado: como los funcionarios.
18 de febrero de 2008
Baza, 1; Real Jaén, 0
