Resulta esperanzador que su máximo responsable afronte la crisis directamente
A lo que se ve la actual junta directiva del Real Jaén tiene una solidez ejemplar, sin fisura. Es verdad que en el terreno deportivo la alianza de la mala suerte con determinados errores de planificación, ya criticados, han impedido que las cosas resultasen como a todos hubiesen gustado, pero el estilo de cómo consolidar una institución sin grandes medios, rehuyendo las alharacas, con prudencia, desde los cimientos, con el rigor y la seriedad que merece esa tarea, debe pasar a la historia como un modelo a imitar. En pocas ocasiones las instituciones giennenses van a encontrar paradigmas a que asemejarse. En momentos como los actuales, en los que de nuevo aparecen las grietas, resulta muy esperanzador y tranquilizador para quienes aman al Real Jaén que su máximo responsable afronte la crisis directamente, la asuma ante sus trabajadores y cree con ellos la complicidad suficiente para ganarse un aplauso de despedida. ¡Ahí es nada! Ojalá que más bien pronto que tarde, para satisfacción de todos, la actual junta directiva goce de los oropeles de un gran éxito que sin duda merece. (Y ahora ¿qué hacer con el mal gesto de Sutil? Desde luego que cabe entenderlo en el contexto de la confianza familiar en la que el jugador siempre se ha movido con los espectadores. Sutil, Paco Sutil como muchos le llaman, ha dado muestras en muchas ocasiones de sentirse uno más de los giennenses de la grada, a los que ha animado, exigido, estimulado y, a veces, hasta regañado. Sin que eso signifique que se desentienda de su solidaridad y compromiso con sus compañeros profesionales, siempre ha parecido que era más del mundo de los espectadores que del de sus compañeros. El ser el jugador con más tiempo en el club donde empezó casi como un niño y que nunca salió de aquí pero sobre todo el carácter que manifiesta en sus actuaciones en el campo le muestran que es uno más de los aficionados que acuden a La Victoria y se irritan cuando el equipo no gana. Y en ese estar en familia el incidente representa una expresión cariñosa y mortificada del hermano que se enfada con el hermano, le da un coscorrón o le grita un ¡carajo! destemplado que se apaga nada más decirlo. Aunque debió callarse cuando sus compañeros de grada se impacientaban y veían que no había modo de ganar al Betis B. Su mueca, incorrecta desde luego, le acerca a la afición. ¿Bastará un cariñoso tirón de orejas del buen patrón?).
ELIMINACIÓN DEL GETAFE EN LA COPA DE LA UEFA
Pocas veces un país entero, como España en este caso, se ha desvelado con las lágrimas a punto tras la celebración de un partido que ni era de la selección ni de alguno de los héroes habituales. Las condiciones de origen (un club modesto) y de ejercicio (cómo se desarrolló el partido) consiguieron el milagro. Falta ahora que en la próxima ocasión el protagonista sea, por ejemplo, el Real Jaén.
EL BOXEADOR JAVIER CASTILLEJO PIERDE POR K.O.
De nuevo en la escena pública el debate y la discusión sobre las razones morales y deportivas del boxeo. El español Javier Castillejo, que luchaba por el título europeo de los pesos medios y llevaba, dicen los expertos, ventaja total en el combate sufrió un K.O. imprevisto en el último asalto que le hizo perder la conciencia y hubo de necesitar ayuda para mantenerse en pie el salir del cuadrilátero.
14 de Abril de 2008
Real Jaén, 1; Betis B, 0
(Aunque luego pidió disculpas, Sutil hizo un feo gesto a un sector del público)
