308.- LA SEGUNDA B (5)

El castillo de naipes que supone la Segunda B

Hablando de cómo los jugadores de Segunda B tienen idénticas responsabilidades que, por ejemplo, los internacionales pero no sólo muchísimos menos beneficios sino que, incluso a veces, ni siquiera lo más elemental que les corresponde por contrato, es fácil caer en la cuenta del castillo de naipes que supone la Segunda B. Aunque para ser justos y precisos es necesario distinguir las diferentes conductas de unos y otros clubes, que no todo el mundo se mueve por el mismo camino, los datos son del máximo interés: en el presente año, de los 80 clubes que componen la categoría, 53 han andado con problemas de pago (públicos y conocidos, no se olvide), una situación que ha afectado a 557 jugadores y alcanzado una deuda de 7.807.060 euros (casi mil trescientos millones de pesetas), cantidad tan considerable que produce pavor. Y la verdad es que uno repasa las informaciones de los clubes de la Segunda B (no hablemos de la Tercera División) y encuentra por doquier tropezones económicos en forma de impagos a jugadores que ya no es que deseen mantenerse toda la vida con los beneficios económicos y sociales de esa profesión sino que muchas veces bastante tienen con poder subsistir con cierta prosperidad. Y por ello no se entiende que ni siquiera el sindicato que los propios jugadores tienen se ocupe de plantear soluciones técnicas, sólidas y definitivas, acomodadas a la realidad social y económica del país y a la situación que viven tantos profesionales. En lugar de poner una ventanilla “para reclamaciones”, que quizás sea un buen negocio, ya debería haber hecho público un trabajo que analizara la viabilidad de los distintos niveles administrativos del fútbol español. Y es profundamente lamentable tanto que el sindicato no lo promueva como que los propios sindicados no hayan planteado ya una revolución que haga estallar el acomodo corporativo. Por supuesto que, como en todo, son los grandes e influyentes jugadores los que deberían tomar la iniciativa y a ellos no les incumbe porque por lo general tienen resuelto su problema pero también podría darse un movimiento que de abajo a arriba promueva su defensa definitiva y decisiva. Mientras, todo seguirá y cada uno se apañe como pueda. Por supuesto que esto les ocurre a muchos otros trabajadores que ni siquiera tienen sus oportunidades publicitarias pero éste no es un consuelo con sentido.  

ROBINHO NO ES FELIZ EN EL REAL MADRID
No han dedicado mucho tiempo los sicólogos a estudiar el perfil y la personalidad de los divos artificiales y espurios que pueblan los clubes de la élite mundial del fútbol y sería un trabajo de mucho interés. Y no es el caso de Robinho, que a fin de cuentas es uno más de ellos, sino los valores que rigen sus vidas. Como no es feliz en una empresa, se va a otra. Y lo dice sin apuro ni sonrojo. 

EL ATHLETIC DE BILBAO LUCIRÁ PUBLICIDAD EN SUS CAMISETAS
En su momento algunos clubes decidieron prescindir del ingreso de la publicidad en las camisetas porque el prestigio de la entidad no era acorde con esa imagen comercial. Pero al final las necesidades económicas acaban apretando a todos y el At. Bilbao ha firmado un convenio con una refinería de Vizcaya. Se dice que por ello cobrará dos millones anuales.

11 de agosto de 2008